Es bien sencillo.
Si no le gusta pasar por aquí
no pase.
Si le tiene miedo a la caída
después del vuelo
no se dé alas.
Si no quiere un viaje
a sus adentros
sin sobrevivir a sus lamentos
No viaje.
Sino
siga leyendo
periódicamente
y de vez en cuando
deguste un bocado.
Pruebe
sin compromiso.
jueves, 14 de mayo de 2009
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